No te has dado cuenta, pero yo si, y era una combinación perfecta, eramos el coctel perfecto entre palabra y verso entre locura y cordura.
Era un equilibrio en el que ambos tropezamos.
Y aun me pregunto porque.
He besado mucho, he acariciado y he desnudado almas pero desde la tuya… desde la tuya lo demás no es mas que carroña y yo un cuervo.