lunes, 6 de junio de 2011

En el ahogo de mi existencia decidi ser impermeable.

El agua que me rodea, me aprieta el cuerpo, ejerce tal presión sobre mi que no queda otra que ahogarse.
Sin embargo, tras largos años de asfixia decidí convertirme en impermeable, con todo lo que conllevaba aquello.


No habría oxigeno, pero tampoco agua.
No habría azul, ni verde ni rosa.
No habría nada.
Solo duro plástico. 

No habría nada.

1 comentario:

  1. estoy aún decidiendo qué me gusta más, si la foto o el texto... muy bueno éste último.. mola mucho!
    Guapa!

    ResponderEliminar